martes, 24 de noviembre de 2009

Torneo Mayor - Ronda 6

Mario Landriel continúa liderando el certamen, con cinco puntos y medio, seguido a una unidad por Laureano Rodríguez.

Sanhueza y Landriel jugaron la variante Winawer de la defensa francesa, empleando las negras la línea patrocinada por Petrosián (4...Dd7); la partida siguió, con trasposiciones, la jugada entre Fischer y Bisguier en 1957; en aquélla, las blancas atacaron el enroque largo rival y llegaron antes a su objetivo que el contraataque sobre su rey en el otro flanco. En nuestra partida las blancas eligieron otro plan, realizando la ruptura en el centro; tras una batalla táctica consiguieron ganar calidad, pero las negras poseían compensación al no tener el alfil blanco campo de acción y como resultado lograron capturar varios peones, cuyo avance definió el juego:


Seguiría 45...c4++.

Rodríguez dio inicio con la apertura italiana y Sanfilippo respondió con la defensa húngara. En el medio juego ambos jugadores se embarcaron en lances tácticos, muy del gusto de ellos y como consecuencia las blancas consiguieron la pareja de alfiles mientras que las negras quedaron con un peón aislado. El paso al final por parte del segundo jugador fue un error:


Tras 33.Txe7 Axe7 34.Ac8 a5 35.Axb7 el peón de ventaja garantizó la victoria.

Pérez Cascella planteó el sistema clásico ante la defensa india de rey de Lujambio y eligió una línea secundaria consistente en avanzar y sacrificar el peón e en e6; sin embargo, las negras no respondieron con precisión (10...Cde5! conduce al equilibrio, según Burgess) y las blancas, al evitar por ese motivo el cambio de las damas, pudieron incrementar la presión. Aunque las torres se cambiaron, quedó la debilidad de la diagonal a2-g8, por donde las blancas aprovecharon la temeraria salida del rey:


36.Ah6+ 1-0. Si 36...Rf6 37.g5++ y si 36...Rg8 37.Cxd8+, jaque descubierto que gana pieza.

Sánchez planteó el ataque Chatard-Alekhine ante la defensa francesa de Paganini, pero éste lo rehusó.


Aquí las blancas decidieron realizar una combinación, pero la maniobra tenía una falla; olvidaron el consejo de Capablanca: "Toda combinación larga pierde pieza en la última jugada".

17.Cxd5 exd5 18.Txd5 Cb4 19.Txd7 (también es posible 19.e6 Cxd5 20.Txd5 Axe6 21.Txd8+ Txd8=) 19...Cxa2+ 20.Rb1 Cc3+! 21.bxc3 Db6+ 22.Rc1!? (rechazando el empate con 22.Ra1 Da5+ 23.Rb1 Db6+, con jaque perpetuo.) 22...Aa3+ 23.Rd2 Rxd7 24.Re1+ Re8 25.Cd4. Las blancas sacrificaron calidad para continuar la lucha, teniendo compensación por encontrarse el rey negro expuesto. Pero había que jugar con mucha exactitud y en su defecto, primero dejaron escapar esa ventaja, al permitir un nuevo jaque perpetuo, y luego todo el punto, al permitir el cambio de damas; el final no se pudo sostener.

Di Giannantonio-Dlugovitzky fue una defensa Petroff, variante de los tres caballos, que siguió los lineamientos de la partida Alapin-Alekhine, Carlsbad 1911, aunque el propio Alekhine recomienda no realizar la jugada que hizo, 7...d5, sino ...d6, para evitar el cambio del peón doblado blanco. La lucha giró en torneo de ese peón y del caballo en e4.


Las blancas expulsaron el caballo mediante el doblamiento de sus peones f y en g5 está copado, por lo que la amenaza es 17.h4. Podía seguirse 16...Tad8 o incluso 16...h6, pero tras 16...Dh6?? siguió igualmente 17.h4 Dxh4 18.Th1 y la que queda copada es la dama.

Martyniuk jugó la apertura Benkö y González respondió ocupando el centro con peones e incluso avanzando con los del flanco del rey sobre el enroque enemigo. Las blancas perdieron o sacrificaron varios peones para obtener contrajuego y la fortuna les sonrió, pues en el juego abierto consiguieron realizar varias maniobras que ganaron material. Un último lance doblegó al adversario:


Rara enfilada de alfil.

Oliva-Riquelme fue una especie de defensa moderna, en donde las blancas capturaron el peón de e6, pero se olvidaron la dama allí:


Tras 14...Ce5 la reina está atrapada. Afortunadamente las blancas obtienen suficiente compensación con 15.Cxe5 Axe6 16.Cg6+ Rg8 17.Cxf8 Dxf8 18.Txe6, pero el juego posterior en el flanco de rey fue pobre y las negras lograron una ventaja de material decisiva.

Rostoll jugó la apertura Réti, pero Evans no ocupó el centro, así que las blancas retomaron su función. Tras una compleja fase inicial, el primer jugador logró la disposición ideal:


Créase o no, las blancas se las ingeniaron para perder los tres peones c, d y e, lo cual no fue óbice para que volvieran a tomar el mando de la partida utilizando precisamente las casillas desocupadas por esos peones:



Muñoz optó por el fianchetto de rey ante la defensa india de rey de Castro. Las negras realizaron su plan ...f5 y las blancas ocuparon la casilla e6 con su caballo. La clavada por la diagonal a3-f8 permitió una maniobra de simplificación cuya clave, la captura del peón b, vemos aquí:


La torre negra ataca mediante enfilada a las dos piezas menores blancas. ¿Cómo salvarlas?
28.Cc5! Una típica maniobra de contraataque, en la que la pieza pasiva defiende a la activa. Tras 28...Cxc5 29.Axc5 la realización del peón de más fue cuestión de técnica.

Arias y Aguilar jugaron un gambito de dama de múltiples incidencias.


En este momento las blancas realizaron el avance d5 (movimiento que hubiera traído ventaja con anterioridad) y las negras, en lugar de tomar simplemente con el peón, lo hicieron con el alfil, con lo cual lo autoclavaron: 27...Axd5?? 28.Txe8+ Txe8 29.Cc3 Ae4 30.Cxe4 1-0.

Micalizio, ante la defensa francesa de Beroiz, se decantó por la variante Richter-Anderssen. Ambos bandos enrocaron largo y las blancas, gracias a su ventaja de espacio, pudieron amagar el ataque al enroque y abrir el juego en el flanco de rey.


Viéndose en inferioridad, las negras plantearon una celada: 39...Axd4! 40.Cxd4 Txd4 y si 41.Dxd4?? e5+!, jaque descubierto y la dama blanca se pierde. Las blancas advirtieron la trampa y jugaron 41.Dxe6+ Dxe6+ 42.Txe6 y el final no ofreció dificultades.

1 comentario:

Unknown dijo...

Mi nivel es bajo en ajedrez
pero mi afición es alta.
Estas partidas me hacen estudiar, pero lo paso formidable.
Gacias por estos correos, son formidables
Rafael