domingo, 26 de septiembre de 2010

Torneo Selección - Ronda 3

Quedó como único puntero Luciano Andrada, seguido a medio punto por Santa Coloma, Hernández, Álvarez y Firpo.

Andrada abrió con la española y Martinel se embarcó en los cauces de la defensa abierta, sistema en que las blancas sacan ventaja si no se apresuran a crear complicaciones tácticas, dadas las debilidades estructurales de las negras; cualquier refriega no le supone al segundo jugador peligro alguno, como máximo les permite simplificar el juego. Así sucedió en esta partida: las negras pudieron quedar con cierta ventaja tras 17...Dxe5 o igualar en la siguiente situación:


Ante la amenaza de fourchette la respuesta 21...f5 era única: 22.exf6 De3+ 23.Tf2 (única) 23...Ac3=. Pero siguió 21...f6??, que permite el tenedor 22.f5 Df7 23.fxg6 Dxg6 24.Ae3 h5 25.h3 c5 26.exf6 cxd4 27.Dxd4 Tc2 28.Dxd5+ Rh7 29.Axc2 Dxc2 30.Dxa8 1-0.

Hernández optó por la variante Rossolimo ante la defensa siciliana de Santa Coloma, erigiendo un muro de piedra en el centro. Las negras intentaron abrirlo y perdieron un peón. La lucha para frenar el peón pasado originó posibilidades tácticas, vistas y no vistas; el curso de la partida condujo a un final con calidad de más para las blancas, pero pocas chances de victoria. Un descuido mutuo (35.Ta8+ ganaba pieza) posibilitó el cambio de un par de torres y la llegada a un complicado final.


Las negras construyeron una fortaleza, pero equivocadamente llevaron el rey a h4 (con el monarca en g7 y el alfil en la gran diagonal es tablas). Ahora las blancas pueden ganar simplemente yendo a capturar el peón g: 52.Rf6 sin temor a 52...f3 53.Te4+. Pero jugaron 52.Te4? y luego de 52...g5 53.Rf5 g4 54.hxg4 [o la celada 54.Txf4 Axf4 55.Rxf4 gxh3?? 56.g3++, pero 55...g3 56.Rf3 Rg5 57.Rxg3 h4+ es tablas] 54...hxg4 55.Txf4 Axf4 56.Rxf4 g3 57.Rf3 Rh5 58.Rxg3 Rg5 fue tablas.

Cuello y Álvarez jugaron una defensa Pirc que se transformó en una siciliana dragón. Los contrincantes iniciaron sus ataques a los enroques opuestos, pero no duraron mucho porque pronto decidieron cambiar las damas. A continuación, una secuencia táctica fue el momento crítico de la partida:


La cuestión es si el ataque al peón d triunfa: 19...b4 20.Ce4 Txd5? [20...Cxe4 21.fxe4 Rf6 con ventaja para las negras por su rey activo y las debilidades blancas] 21.Cxf6? [21.g5! Cxe4 (si 21...Txd2 22.gxf6+ jaque intermedio) 22.Txd5 Cc5 23.Te1 con ventaja de calidad] 21...Txd2 22.Rxd2 Rxf6 y el peón de más fue suficiente para sellar la victoria.

Mancilla-Firpo fue una apertura española en la que para evitar el contraataque Marshall las blancas entraron en el ataque central. Sin embargo, esta variante encierra un peligro: el arca de Noé.


Tras la captura en d4 siguió 14...c5 15.Dd3 c4 ganando el alfil encerrado.

Colombo Berra entró en la variante del cambio frente a la defensa francesa de Zinni. Las blancas obtuvieron ventaja de desarrollo, pero yendo a capturar un peón en el flanco de dama permitieron el equilibrio. En el prefinal las piezas negras se mantuvieron pasivas y las blancas lograron ganar un peón, pero el final de torres era de tablas.


Había que eliminar el peón pasado con 42...c6! 43.Txb6 Txg5+ 44.Rf2 Rd6=. En cambio, el contraataque con la torre no fue suficiente 42...Td8 43.Rf2 Td2+ 44.Rf3 Txb2 45.Rg4 Th2 46.c5 Rd7 47.cxb6 cxb6 48.Txb6 Tb2 49.Tb5 Re7 50.Rf5 a4 51.bxa4 1-0.

Larrosa-Ballari fue una apertura inglesa en donde las negras presionaron en la columna e y mediante una combinación quedaron con dos peones de ventaja en un final de torres. Luego cedieron un peón para pasar al final de peones, que no resultó tan trivial como parecía:


La manera más rápida de coronar es desviando el peón h: 48...g5 49.hxg5 Rxg5 50.Rc5 h4 51.Rb6 h3 52.Rxb7 h2 53.Rxa6 h1D-+.
Con la jugada de la partida las cosas se complican: 48...Rg4 49.Rc5 Rxh4 50.Rb6 g5? [50...Rg5 es la única jugada ganadora, porque es necesario que el rey ayude a la dama a dar mate en d7, como veremos: 51.Rxb7 h4 52.Rxa6 h3 53.b5 h2 54.b6 h1D 55.b7 Dc6+ 56.Ra7 Dc7 57.Ra6 Db8 58.Rb6 Rf6 59.a6 Dd6+ 60.Ra7 Dc7 61.Ra8 Db6 62.a7 Dc6 63.Rb8 Dd6+ 64.Rc8 Re7 65.b8C (65.b8D Dd7++ o 65.a8D Dd8++) 65...Dd5 66.Rc7 Da8 y gana coronando el otro peón] 51.Rxb7 g4 52.Rxa6 [es equivalente, pero menos práctico 52.b5 axb5 53.a6 g3 54.a7 g2 55.a8D g1D 56.Df8! y esta posición es tablas, de acuerdo a las bases de finales, y aunque la explicación está fuera del alcance de la mente humana, podemos conjeturar que las blancas deben evitar que los peones avancen un paso más...] 52...g3 53.b5 g2 54.Ra7? [la evidente 54.b6 es la única jugada que entabla 54...g1D 55.b7 y la dama, sola, no puede predominar sobre los peones unidos] 54...Rg5 [54...g1D+ es más lógico, pero equivalente, porque, de todos modos, para ganar hay que coronar el otro peón] 55.b6 h4 [55...g1D ahora sí es mejor, porque clava al peón b] 56.a6 [56.b7 es más tenaz] 56...h3 57.b7 h2 58.b8D g1D+ 59.Ra8 h1D+ 60.Db7 Dh8+ 61.Db8 Dxb8+ 62.Rxb8 Db6+ 0-1.

Rebossio y Castro jugaron, por trasposición, una defensa Benoni moderna, sistema de los cuatro peones. Las blancas realizaron el avance temática e5, pero su posterior adelantamiento a e6 sólo consiguió que las negras quedaran con piezas más activas. En determinado momento el segundo jugador realizó un interesante sacrificio de dama por torre y pieza menor, pero no aprovechó suficientemente la debilidad de la primera fila blanca para ganar un peón (29...Axb2) y el final quedó equilibrado. Las blancas, entonces, resolvieron intentar tender una red de mate acercando el rey a su homólogo, lo cual no estuvo exento de riesgo.


Las blancas amenazan un mate en la última fila y las negras, en la columna h: 45.De1 Ae3 46.Dh1 [era más directo 46.Dc3+! Ad4 47.Dc8+ y mate] 46...d5 47.Dh3 Tc4 48.Rh5?? Permite una amenaza ineludible. [48.Dh2 mantenía la amenaza de mate en la octava y la defensa de h4, impidiendo al mismo tiempo ...Af2] 48...Af2. Concentrando las fuerzas en h4; no hay posibilidad de contraataque: 49.Dh2 Txh4+ 50.Dxh4 Axh4 51.Rxh4 Rg7 y el final está ganado.

Velasco, ante la defensa siciliana dragón de Frenquelli, utilizó un esquema algo restringido, pero que dio resultado. Las negras intentaron forzar los acontecimientos sacrificando un peón, pero las blancas se defendieron bien y podrían haber quedado con ventaja si hubieran encontrado la intermedia 24.Tac1! Tras una serie de errores mutuos (25...Dc2-+) las negras volvieron al ataque, aprovechando la situación expuesta del monarca contrario y las blancas volvieron a encontrar el equilibrio. Finalmente, cuando bastaba cambiar las damas para entablar, el primer jugador cometió el último error:


31.Db4?? Deja al rey solo para que le den mate: 31...Dc6+ 32.Cf3 Dxf3+ 33.Rh2 De2+ 0-1.

Zocchi y Beroiz jugaron una defensa escandinava, en donde las negras, tras una escaramuza táctica, lograron el equilibrio mediante el cambio de piezas. Luego las blancas se arriesgaron con el enroque largo y las negras tomaron la iniciativa, pero nuevamente el cambio de figuras trajo el equilibrio. En el final de torres la pieza pesada blanca se tornó más activa, pero inopinadamente quedó atrapada:


36.Th8 era única para evitar el cambio de torres con peón de menos, pero las blancas vieron un espejismo: 36.hxg6?? Txh6 37.g7. Esta combinación es conocida, pero en este caso falla porque la torre negra tiene acceso, si no a la fila 8, sí a la columna g para detener la coronación: 37...Tg6 0-1.

Caballero empleó la apertura inglesa ante Jessé para alcanzar un especulativo esquema de fianchetto de dama y enroque largo, pero un prematura liberación de líneas en el centro hizo evidente la debilidad de este tipo de enroque: la exposición del rey:


17...exf3 18.gxf3 Txe3! 0-1. Si 19.Dxe3 Af4, clavada letal.

Salvatierra y Santianes jugaron una apertura italiana, donde las blancas realizaron el ataque Møller y las negras la defensa de Lasker, tal como la partida Znosko Borovski-Salwe, Ostende 1907, aunque en ambos casos tardaron en echar al caballo instalado en e4 con f3 para alcanzar una compleja compensación. Todas estas disquisiciones teóricas se acabaron cuando las blancas ganaron calidad aprovechando un peón clavado. Las negras, en desventaja material, decidieron recurrir a un ataque de peones sobre el enroque rival, lo que de alguna manera dio resultado, porque terminaron por llegar a una posición de dos torres contra torre y alfil y un peón en séptima sostenido por otro.


Con defender el alfil atacado (41...Tg8) el triunfo de las blancas estaría en duda. Pero jugaron 41...Tf8 especulando con el mate en f1, lo cual es fácilmente evitable: 42.Tgxg4+ Rh5 43.Tgf4 [naturalmente lo más sencillo es cambiar las torres: 43.Th4+ Rg5 44.Teg4+ Rf5 45.Tf4+ Rg5 46.Txf8 Rxh4 47.Tg8+-] Tb8 44.Te1 y todo el peligro pasó.

Arias se decidió por el ataque Harrwitz (4.Af4) del gambito de dama contra Paradell y se continuó con un desarrollo tranquilo de las fuerzas. Una situación desafortunada de las piezas menores blancas, delante de sus peones, fue la causa de que la ruptura d5 se volviera en contra:


18...e5 19.Ce2? [19.d6 Axe4 20.Dxe4 Axd6 21.Cd5 con compensación por el peón] 19...f5 20.Axf5 [si 20.Ad3 e4 y si 20.d6 Axe4 21.dxe7 Axc2 22.exf8D+ Cxf8 23.Txc2 también pierde] 20...Txf5; con pieza de más las negras emprendieron un exitoso ataque al rey.

1 comentario:

JPS dijo...

que "groso" estas Lucho